En la noche del día 25 de junio de 2015, se celebraban elecciones a Presidente de la Unión de Cofradías de Semana Santa de Úbeda, a las que mi persona encabezaba la candidatura junto a Pedro Ángel López Barella que lo hacía como Vicepresidente y Francisco Miguel Uceda Tello como Administrador.
Una vez celebradas y contado el escrutinio, dio como resultado que de las 58 personas cofrades, 39 lo hicieron con la papeleta del sí, 18 lo hicieron con la papeleta en blanco y 1 fue nulo.
El equipo que se iba a formar era para estar al servicio por lo que nos une y queremos, nuestra Semana Santa, lo hacíamos con el entusiasmo e ilusión para sumar y trabajar, tan simple como eso, estar al servicio de las cofradías y de la Semana Santa de Úbeda.
La Unión de Cofradías necesita estar fuerte, es una institución pieza fundamental en la sociedad actual ubetense, y ante esa fortaleza que debe de figurar, y viendo el alto número de votos en blanco que lo que hacían es no dar el apoyo para que este equipo que encabezaba pudiera trabajar con esa fortaleza, y pensando únicamente por el bien de la Unión de cofradías y por ende por el bien de nuestra Semana Santa, se optó en no aceptar el cargo.
Fue una decisión pensada y meditada, ya que en el ambiente previo ya lo veníamos observando. Ninguno de los que íbamos a formar el equipo lo hacía para ocupar un cargo, lo hacía para seguir colaborando en el camino de estos 61 años de vida que lleva la Unión y por el amor a nuestra Semana Santa.
Por medio del presente quiero agradecer muy emotivamente en primer lugar a aquellos 39 cofrades que nos dieron el apoyo en las elecciones y pedirles perdón públicamente, por no hacer uso de la palabra ya que pensé que si lo hacía podía estar haciendo daño a la institución de la Unión de cofradías, dando una mala imagen, ya que pienso que la Institución está por encima de todo.
Agradecer también a todas las personas que han mostrado su apoyo antes de las elecciones y después de tomar la decisión.
Agradecer al equipo humano que me acompañaba en este proyecto, por la ilusión que tenían y pedirles perdón al dejarles sin la misma.
Pedir perdón a todo aquel que le haya fallado, no es mi intención de hacer daño a nadie.
Seguiré amando mi Semana Santa y colaborando con ella en mi medida como así lo he hecho en toda mi vida.
Un abrazo en Cristo.
PAZ Y BIEN.
Felipe Torres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario