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ÚBEDA | RELIGIÓN
El Cristo de la Caída de Úbeda (Jaén), del escultor Mariano Benlliure, y de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Caída, participará en el Vía Crucis que se celebrará durante la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Madrid 2011 el próximo mes de agosto.
Así, el paso de la Caída formará parte de la sexta estación del Vía Crucis de la JMJ, en sustitución de la escultura 'Cristo caído camino del calvario' de Nicolás Fumo, proveniente de Madrid, que finalmente no participará por razones técnicas relacionadas con el estado de conservación de la obra, según ha indicado el comité organizador de la JMJ.
De esta forma, este paso se convierte en el quinto procedente de Andalucía, de donde vendrán también el 'Jesús del Prendimiento con Judas y San Juan' de Málaga; 'La Verónica', de Jerez de la Frontera; Jesús Despojado de sus Vestiduras por dos sayones', de Granada; y el 'Santísimo Cristo de la Buena Muerte y Ánimas' de Málaga.
La nueva imagen muestra, según ha explicado el catedrático de Historia del Arte de la Universidad Complutense de Madrid, Francisco José Portela, una "figura de Cristo con la cruz a cuestas, semidesnudo y en actitud de equilibrio", a su juicio, con un "acertado estudio anatómico".
El hermano mayor de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Caída, Juan Antonio Lindes Lagunas, ha considerado que las imágenes de la Semana Santa "hacen vivir el Vía Crucis más profundamente, son una catequesis plástica y para eso fueron creadas".
Lindes ha resaltado que las JMJ "han cambiado la mentalidad de los jóvenes allá por donde han pasado" y, por ello, ha subrayado que es "una gran responsabilidad" participar de esta manera.
La cofradía ubetense quiere implicar a las 18 hermandades de la ciudad en los preparativos de la jornada, pues, para ellos, es "un hecho histórico", según ha precisado el hermano mayor de la Cofradía.
En la misma línea, el vocal de Juventud de la Cofradía, José Luis Latorre, considera que la elección del paso de la Caída "es un privilegio", que, a su juicio, se produce "en el momento justo para enganchar a los jóvenes de Úbeda para que vayan a la JMJ".
El Cristo de la Caída se encargó a Benlliure para sustituir a la pieza anterior --del siglo XVII-- desaparecida durante la Guerra Civil española. El artista entregó finalmente su obra en 1942.
Así, el paso de la Caída formará parte de la sexta estación del Vía Crucis de la JMJ, en sustitución de la escultura 'Cristo caído camino del calvario' de Nicolás Fumo, proveniente de Madrid, que finalmente no participará por razones técnicas relacionadas con el estado de conservación de la obra, según ha indicado el comité organizador de la JMJ.
De esta forma, este paso se convierte en el quinto procedente de Andalucía, de donde vendrán también el 'Jesús del Prendimiento con Judas y San Juan' de Málaga; 'La Verónica', de Jerez de la Frontera; Jesús Despojado de sus Vestiduras por dos sayones', de Granada; y el 'Santísimo Cristo de la Buena Muerte y Ánimas' de Málaga.
La nueva imagen muestra, según ha explicado el catedrático de Historia del Arte de la Universidad Complutense de Madrid, Francisco José Portela, una "figura de Cristo con la cruz a cuestas, semidesnudo y en actitud de equilibrio", a su juicio, con un "acertado estudio anatómico".
El hermano mayor de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Caída, Juan Antonio Lindes Lagunas, ha considerado que las imágenes de la Semana Santa "hacen vivir el Vía Crucis más profundamente, son una catequesis plástica y para eso fueron creadas".
Lindes ha resaltado que las JMJ "han cambiado la mentalidad de los jóvenes allá por donde han pasado" y, por ello, ha subrayado que es "una gran responsabilidad" participar de esta manera.
La cofradía ubetense quiere implicar a las 18 hermandades de la ciudad en los preparativos de la jornada, pues, para ellos, es "un hecho histórico", según ha precisado el hermano mayor de la Cofradía.
En la misma línea, el vocal de Juventud de la Cofradía, José Luis Latorre, considera que la elección del paso de la Caída "es un privilegio", que, a su juicio, se produce "en el momento justo para enganchar a los jóvenes de Úbeda para que vayan a la JMJ".
El Cristo de la Caída se encargó a Benlliure para sustituir a la pieza anterior --del siglo XVII-- desaparecida durante la Guerra Civil española. El artista entregó finalmente su obra en 1942.
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